Imagina entrar a un estudio de grabación y sentir que la energía del lugar apenas puede contener la creatividad que está por desatarse. Así es como recordaré la sesión de grabación con Rauw Alejandro, un instante que se convirtió en un auténtico torbellino musical y emocional. La combinación de talento, pasión y un entorno que respira ritmo y sensualidad fue lo que hizo que esta grabación se transformara en una experiencia inolvidable, casi mágica. Desde el primer acorde hasta el último ajuste, cada segundo fue un viaje en tren hacia la cima del reggaetón
La fusión de ritmos: el inicio de la grabación
La sesión comenzó con Rauw llegando al estudio con esa energía única que solo él sabe aportar. Nuestro enfoque era claro: fusionar elementos de reggaetón con toques de pop y R&B para crear un sonido fresco que hiciera vibrar a la audiencia. Así que de entrada, comenzamos con una idea brillante que habíamos cocinado durante días.
- Un riff pegajoso que se metiera en la cabeza
- Una base rítmica contundente, perfecta para poner a todo el mundo a bailar
- Y un concepto lírico que hablara de amor, desamor y todo lo que hay en medio
Rauw, con su característico estilo, comenzó a improvisar sobre la melodía. La magia sucedió en esos momentos en los que sentimos que no solo estábamos grabando música; estábamos creando un manifiesto sonoro que hablaría a las almas. ¿Y quién no ama eso?
Incorporando los elementos sorpresa: un giro inesperado
No todo fue un paseo por el parque. Durante la grabación, decidimos incorporar una sección sorpresa: un solo de guitarra flamenca que daba un giro inesperado a la canción. La idea fue de último minuto, pero sabíamos que Rauw no tenía miedo de arriesgarse. Junto a un talentoso guitarrista local, logramos unir el reggaetón con esas notas que recordaban a una fiesta en la costa española.
Esta riqueza de sonidos y texturas llevó el tema a otro nivel. Pero lo más impresionante fue la capacidad de Rauw para adaptarse y hacer suyas cada parte de la canción. Cuando le vi grabar esas estrofas, sentí que el estudio era una extensión de su propia alma; cada nota parecía llevar un pedacito de él.
La conexión entre el artista y el productor
Una de las cosas más fascinantes de ser productor en estas sesiones es la conexión que se establece con el artista. Rauw es quien lleva la batuta, pero mi trabajo es entender su visión y ayudar a darle vida. Esa complicidad se volvió palpable cuando comenzamos a afinar los detalles finales. Desde la elección de instrumentos hasta las voces de fondo, cada decisión contaba una historia.
Incluso, en un momento de la grabación, Rauw me miró y dijo: “Alberto, esto tiene que sonar como un latido. Necesito que sientan mi corazón”. Esas palabras resonaban en mi mente mientras ajustábamos los niveles finales.
El momento culminante: la última toma
El clímax llegó cuando grabamos la última toma. Ya era tarde, pero la energía en el estudio era casi palpable. Rauw se encerró en su mundo, y yo, desde la consola, observaba cómo se transformaba en esa figura magnética y emocional que todos conocemos. Con cada nota, parecía que estábamos sellando un pacto: esta canción no solo le pertenecería a él, sino que sería un legado para todos aquellos que han amado y perdido.
Bajo las luces tenues del estudio, y con una lágrima de emoción, escuchamos la toma final. Sabíamos que habíamos hecho algo grandioso, algo que resonaría con sus seguidores y aquellos que, sin saberlo, estaban a punto de enamorarse de su música. Esta no fue solo una sesión de grabación; se convirtió en un capítulo memorable dentro de la historia del reggaetón.
Así que esta es la historia de una sesión de grabación inolvidable para Rauw Alejandro: un viaje lleno de sorpresas, emociones y, sobre todo, música que trasciende. Un verdadero hito que estoy seguro de que será recordado por mucho tiempo.
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1980, Barcelona, España.
Ingeniero de sonido, mezcla y mastering.
Guitarrista y compositor de música.
Ha lanzado 4 álbumes, 9 EPs y decenas de sencillos de diferentes géneros musicales.
También ha mezclado, masterizado y grabado para innumerables artistas independientes.
Fotógrafo y dibujante por afición.