En el fascinante mundo de la música, hay un aspecto que a menudo se pasa por alto: la experiencia musical de las personas sordas. Muchos creen erróneamente que, al no poder oír, la música se convierte en un concepto totalmente ajeno. Sin embargo, aquellos que han explorado esta cuestión más a fondo saben que la relación entre la música y el cuerpo va mucho más allá de las ondas sonoras. Es un baile sensorial en el que el ritmo, las vibraciones y el sentimiento se convierten en el hilo conductor. Y a través de mis años en la industria, he tenido el privilegio de conocer a muchos músicos sordos cuya relación con la música es tan intensa como la de cualquier persona con capacidad auditiva.
La Música como Vibración
Primero, es crucial entender que los sordos no son ajenos a la música; simplemente la experimentan de manera diferente. La música puede ser percibida a través del cuerpo, y esto se hace de varias maneras:
- Vibraciones: La energía que emite un bajo potente o una batería fuerte es algo que se siente en todo el cuerpo. Las frecuencias bajas son especialmente efectivas para esta conexión.
- Ritmo: El compás y la estructura rítmica de una canción pueden sentirse a través del suelo o en los objetos que nos rodean. Muchos músicos sordos utilizan estas sensaciones rítmicas para guiar su interpretación musical.
- Visualización: La música también puede interpretarse visualmente a través de luces y movimientos. Esto ha llevado a la creación de innovadores espectáculos de luces que acompañan a la música, ofreciendo una experiencia sensorial adicional.
¿Cómo Experimentan los Músicos Sordos la Música?
Durante mis años de producción musical, he colaborado con artistas sordos que me han enseñado a apreciar este aspecto del arte musical. Muchos de ellos pueden “escuchar” la música a través de la vibración. Por ejemplo, al colocarse en contacto con un altavoz o sentir el suelo vibrar, pueden captar el ritmo y la emoción de la música que, para otros, es solo un conjunto de ondas sonoras. Este enfoque también se puede ver en las clases de danza y en eventos donde se invita al público a sentir la música a través de diferentes elementos.
El Poder de la Comunidad y la Inclusividad
Los músicos sordos han formado comunidades creativas que fomentan la inclusión y la colaboración. En estos espacios, se busca entender y expandir las fronteras de la música. Además, la tecnología está jugando un papel crucial en esto. Dispositivos de vibración y sistemas de traducción visual permiten que más personas participen y experimenten la música de manera significativa. Las aplicaciones y herramientas creativas están surgiendo para ayudar a conectar a todos con el arte musical, independientemente de su capacidad auditiva.
La Música como Lenguaje Universal
La música, en su esencia, es un lenguaje universal. Los sordos están desafiando la percepción tradicional de lo que significa “escuchar” música. Esto lleva a la pregunta: ¿podemos considerar una pieza musical completa si no se puede oír? La respuesta se revela en la discusión, el diálogo y la experiencia. Las interpretaciones vibracionales, las coreografías conectadas con el ritmo y los spectacles sensoriales son todo parte de un tejido cultural más amplio.
Así que, la próxima vez que escuches una canción, piensa también en aquellos que no tienen la capacidad de oírla, pero que la sienten en cada fibra de su ser. Para ellos, la música no es solo un sonido, es una experiencia física, emocional y profundamente humana. La verdadera magia de la música radica en su habilidad para unirnos en la diversidad de nuestras percepciones. ¿Te atreves a sentirlo?
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1980, Barcelona, España.
Ingeniero de sonido, mezcla y mastering.
Guitarrista y compositor de música.
Ha lanzado 4 álbumes, 9 EPs y decenas de sencillos de diferentes géneros musicales.
También ha mezclado, masterizado y grabado para innumerables artistas independientes.
Fotógrafo y dibujante por afición.