Imagina por un momento un mundo donde la música no tenga resto de color, forma o melodía. Un mundo en el que todo lo que conocemos de la música—los acordes que nos haces vibrar, las letras que nos conmueven—se desvanece como si nunca hubiera existido. Si todos fuéramos ciegos y sordos, ¿qué nos quedaría realmente de la esencia musical? Este es un viaje en el que, aunque pueda parecer inusual, exploraremos las profundidades del sentido musical más allá de lo que nuestros sentidos tradicionales pueden ofrecer.
La música más allá del sonido
La música, en su forma más pura, es una experiencia sensorial que trasciende las notas y los ritmos. Un músico ciego y sordo podría no percibir el sonido como nosotros, pero eso no significa que no pueda conectar con el arte musical. La esencia de la música radica en sus vibraciones, en la energía que transfiere y en las emociones que evoca, incluso sin la capacidad de escuchar o ver. Estoy hablando de un lenguaje universal que se siente en el cuerpo, que se traduce en movimiento y energía.
Vibraciones que se sienten
Cuando exploramos la idea de la música desde un enfoque más táctil, nos damos cuenta de que las vibraciones físicas pueden contar una historia por sí solas. Los sonidos que normalmente percibimos se convierten en un lienzo en el que el cuerpo puede pintar su propio retrato musical. Un individuo ciego y sordo podría entender la música a través de:
La creación musical en un vacío sensorial
Como productor, he tenido la oportunidad de trabajar con músicos que aportan su propio estilo y perspectiva a la mesa. Crear música para alguien que no puede oír ni ver podría parecer un desafío monumental, pero en cambio, es una invitación a redescubrir el potencial de la creatividad en un espacio inexplorado. Cuando un artista crea pensando en otro individuo sin esas capacidades, el enfoque cambia; se trata de crear una experiencia de inclusividad y conexión sin depender de los sentidos comunes.
¿Qué papel juegan los otros sentidos?
Al mirar más allá de la vista y el sonido, hay otros sentidos que pueden jugar un papel crucial en la apreciación musical:
Redefiniendo la música en un nuevo contexto
La pregunta original se transforma en una reflexión sobre lo que realmente es la música en su forma más elemental. ¿Qué es lo que hemos perdido o ganado al recurrir únicamente a nuestros sentidos más comunes? Tal vez, la música de verdad reside en la capacidad de conectar con otros, de compartir una experiencia emocional que trasciende la vista y el oído. Así, podríamos deducir que la música, incluso en ausencia de esos sentidos, tiene el poder de tocar el alma.
Conclusión
La respuesta a la pregunta sobre qué música podríamos entender si fuéramos ciegos y sordos es mucho más profunda de lo que parece. Nos invita a desafiar nuestras percepciones y a considerar la música como un viaje multisensorial que se siente y se vive. Al final, cada vibración puede formar parte de nuestra existencia, recordándonos que la música no es solo una experiencia acústica, sino una forma de arte que nos une a todos, sin importar nuestras limitaciones.
Así que la próxima vez que escuches una melodía, intenta sumergirte en las vibraciones de su energía y emoción. Quizás descubras un nuevo sentido de conexión que trasciende lo que ya conoces. ¡Y quién sabe! Quizás encuentres algo aún más fascinante que el sonido mismo.
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1980, Barcelona, España.
Ingeniero de sonido, mezcla y mastering.
Guitarrista y compositor de música.
Ha lanzado 4 álbumes, 9 EPs y decenas de sencillos de diferentes géneros musicales.
También ha mezclado, masterizado y grabado para innumerables artistas independientes.
Fotógrafo y dibujante por afición.